Toluca
De acuerdo al Plan de Desarrollo del Estado de México 2017-2023, en la entidad trabajan 250 mil 258 niñas, niños y adolescentes de 5 a 17 años, lo que lo coloca como la entidad del país con mayor número de población infantil ocupada, de acuerdo con el Módulo de Trabajo Infantil 2016 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
A decir del gobierno estatal -a través de dicho plan- estos indicadores requieren especial atención, pues los niños que sufren maltrato físico o emocional pueden presentar retraso en su desarrollo integral.
Asevera también que el problema no sólo afecta a los individuos que sufren de violencia, sino que también afecta gravemente el tejido social actual y futuro.
“El trabajo infantil constituye una violación de los derechos de niñas, niños, y adolescentes, especialmente del derecho a estar protegido contra la explotación, al sano crecimiento, a la educación, al juego, la cultura y el deporte”.
Conforme a este plan, que deberá ser analizado por los diputados antes del 15 de mayo, sostiene que la niñez en situación de pobreza es todavía más vulnerable.
En el Estado de México 54.5% de las niñas, niños y adolescentes se encuentran en esta situación, comparado con un 47.9% de la población general.
En tanto que violencia y el maltrato también, son puntos claves de vulnerabilidad en este segmento poblacional, por su impacto en el desarrollo psíquico y social.
Da a conocer que sólo en el 2016, un total de 35 mil 934 menores de 19 años fueron víctimas del delito, lo cual incluye violencia física y delitos contra la libertad, entre otros, de ahí que estos punto fueron incluidos en dicho plan.
También se reconoce que una de las prioridades del gobierno estatal, es el acceso a la alimentación, debido principalmente a que los niños presentan una inadecuada ingesta de alimentos por prácticas inapropiadas de alimentación y dieta.
A pesar de que se observa una importante disminución en los niveles de esta carencia con respecto a lo registrado en 2010, con un 31.6%, a la fecha el estado aún no recupera los bajos niveles observados en el 2012 que llegaron a ser de 17.7 por ciento.
“Este no es un problema menor, pues indica que existen más de 3.5 millones de mexiquenses que no siempre pueden solventar sus necesidades alimenticias o no tienen acceso a una alimentación sana y nutritiva, o que, incluso, sufren hambre”, señala el documento.
