Diablo: Hola, Camarada Simplicio, ¿cómo te sientes después de la derrota?
Simplicio: !Yo no soy tu camarada, maldito rojillo! Además, andas atrasado de noticias porque ya ni en Rusia se saludan así, ahora que son capitalistas los amigos se llaman Socios...
Diablo: Vaya, Simplicio, de algo te sirvió ir a Rusia, bien dicen que los viajes ilustran. Pero veo que andas muy irritable después de la derrota...
Simplicio: ¿Cuál derrota? Si ganó ya sabes quién...
Diablo: Me refería al 2-0 que le metió Brasil a la Selección Mexicana en el Mundial de Rusia para eliminarla.
Simplicio: Ah, pues eso ya está en el pasado y olvidado. !Hay que ver al futuro con esperanza!
Diablo: ¿Tú crees que México tenga futuro, Simplicio?
Simplicio: Por supuesto, aunque tú siempre lo descompones, pero Dios dispone que sea mejor y tú sabes quién se propone hacerlo aquí en México.
Diablo: Pues no se ve muy claro, cuatro años son muy pocos para transformar la situación mexicana.
Simplicio: ¿De qué hablas? Si va a ser un sexenio y si todo sale bien, podría seguir gobernando Morena mucho tiempo.
Diablo: No, Simplicio, yo hablaba del próximo Mundial de Fútbol en Catar, dentro de cuatro años, en el 2022...no creo que puedan tener una mejor Selección de fútbol para entonces...ni aunque se pinten el pelo de güeros todo el equipo, como Layún y el Chicharito, que se creen futbolistas suecos nada más por teñirse el pelo de rubios.
Simplicio: El colmo de este par, les dio el Síndrome de Estocolmo...
Diablo: ¿Y eso qué es?
Simplicio: Es cuando las víctimas de una violencia, se enamoran de sus agresores. Ese 3-0 de Suecia los marcó...y rechazan ser morenitos acomplejados y creen que se les va a quitar pintándose el cabello de rubio como sus agresores futbolistas suecos.
Diablos: Interesante camarada Simplichovich, ¿y todo eso aprendiste viendo el fútbol en Rusia?
Simplicio: Por supuesto que no. !Ya te dije que ni me recuerdes el fútbol! Por si no sabías, hay vida más allá del balón. En fin, tengo que irme porque salgo de viaje.
Diablo: ¿A dónde vas, Simplicio?
Simplicio: Voy al sureste, a Tepetitlán, a cumplir la manda que le hice a San Peje que si ganaba ya sabes quién, iría a la iglesia del pueblo donde nació el Titán de Tabasco a encender una vela para que su luz divina se extienda a todo México.
Diablo: ¿Y dónde queda eso?
Simplicio: Allá en el municipio de Macuspana.
Diablo: No sabía que había un San Peje en el santoral...más bien a ya sabes quién lo asocian conmigo.
Simplicio: !Eso es una mentira más tuya, puro ¨fake news¨!
Diablo: Por lo que me dices, ahora resulta que sí es un Mesías tropical.
Simplicio: No meramente tropical, es el Mesías Nacional, y aunque te duela va a acabar con el mal que tú fomentas, la corrupción que corroe a la Nación, !Diablo maldito!
Diablo: Medio Mesías Nacional porque la mitad de la nación votó por otros candidatos y más de un tercio de los electores ni siquiera votaron.
Simplicio: Pero eso será superado por la Gran Reconciliación Nacional.
Diablo: Jajajajaaja, ya veremos...
