Toluca/Estado de México
Gemma Martínez Carbajal, jefa del Servicio de Pediatría del Hospital General 220 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), advirtió que bebés y niños menores de dos años no deben usar cubrebocas porque tienen vías respiratorias más estrechas y al usarlo limita la entrada de aire, lo que podría causar asfixia.
Refirió que los niños mayores de dos años sí pueden usar cubrebocas igual que los adultos, debido a que el riesgo de contagio es el mismo, sobre todo si no acatan la sana distancia, el lavado de manos o acuden a lugares con alta concentración de personas y donde haya enfermos.
Es común, dijo, que en casa se contagien cuando los abuelos presentan algún padecimiento respiratorio.
Las caretas para bebés al salir de casa, brindan protección pero los padres no deben confiarse, debido a que si se mueve, podría tapar boca o nariz y si no se dan cuenta, el bebé correría riesgo de asfixiarse.
En todo caso, recomendó trasladarlos en carriola o portabebé y cubrirlos con una sábana. Para los niños menores de dos años y los bebés, lo más conveniente es no salir de casa.
En caso de que lo necesiten, es fundamental la sana distancia y evitar contacto con personas enfermas.
Confirmó que el uso de cubrebocas en niños mayores de dos años debe ser al salir de casa y no haya la sana distancia o en alguien tiene Covid, también deben utilizar esta protección dentro del hogar, en caso contrario, si no hay enfermos al interior, los niños pueden no usarlo pero debe haber higiene de manos.
Indicó que el cubrebocas más recomendable es el quirúrgico, de tela o las mascarillas diseñadas especialmente para niños, éstas últimas se venden en sitios de material médico, son más pequeñas, con dibujos animados y se adaptan a la carita.
En cambio, para los pacientes pediátricos con alguna enfermedad crónica o inmunosupresión, que son susceptibles a contagios, recomendó usar la mascarilla N95.
Para volver a clases usar cubrebocas sólo para la escuela.
Para el regreso a clases, consideró que los niños deben utilizar cubrebocas específico para la escuela, éste es diseñado para mantener cubierta nariz y boca, así como evitar el paso de gérmenes para quien lo utiliza y quienes lo rodean. Precisó que el paliacate o pañuelo provocaría contagios, sobretodo al no usarlo correctamente.
Reconoció que la enfermedad generada por el Sars-Cov-2 en pacientes pediátricos es distinta al adulto. Los niños en su mayoría podrían ser asintomáticos o padecer síntomas leves. Los que se complican son niños con enfermedad pulmonar, cardíaca, crónico, renal, de inmunosupresión, patología que puede obligar a predisponerlos con enfermedad moderada a grave. Por ello, es fundamental la sana distancia para protección de ellos mismos o de familiares enfermos.
Los niños y bebés no deben salir de casa, pero en caso de acudir a consultas médicas, solo deben ir con cita, acompañados por un familiar, al ingresar al consultorio deben lavarse las manos o usar gel, no tocar nada y que no haya juguetes, libros, debido a que son muy susceptibles a tocarse la cara e infectarse.
Para brindar confianza a un niño mayor de dos años sobre el uso de cubrebocas, los padres deben explicar por qué se utiliza, sin generar miedo. Recomendó evitar decir que los virus son agresivos y se pueden enfermar, en todo caso, destacar que usar cubrebocas los protegerá.
Recomendó enseñar a los niños que el cubrebocas no se toca, no moverlo y no se toquen la cara. Para los padres de familia, no deben desentenderse del pequeño cuando porta el cubrebocas, debe supervisarlo todo el tiempo, que no presente coloración o respire de manera regular, que no haya ruidos anormales, como prevención.
