Misticismo, Retórica y Política… ¿O Mesianismo, Demagogia y Populismo?
Imprimir esta página
Publicado en Opinión

Misticismo, Retórica y Política… ¿O Mesianismo, Demagogia y Populismo?

Miércoles, 13 Marzo 2019 00:12 Escrito por 
Misticismo, Retórica y Política… ¿O Mesianismo, Demagogia y Populismo? Misticismo, Retórica y Política…

En 2002 la filial del Fondo de Cultura Económica en Argentina publicó un pequeño libro del historiador y politólogo argentino Ernesto Laclau con el título de Misticismo, Retórica y Política. El autor estuvo aquí en México para la presentación de su obra. 

En ella mezcla conceptos místicos (como la pobreza de espíritu, algo intermedio entre la austeridad republicana y la pobreza franciscana que promete AMLO) del medieval Maestro Eckhart, gran místico del Cristianismo; nociones retóricas, como las implicaciones políticas e ideológicas de los procesos discursivos en la construcción de vínculos sociales, tal como los estudia el literato Paul de Man y las ideas políticas de Gramsci actualizadas por el propio Laclau.

De estas interrelaciones entre los campos de la mística, la retórica y la política, Laclau obtiene una conclusión práctica. La cuestión central es lo que Laclau llama Significantes Vacíos, que con mayor claridad puede ilustrarse con un ejemplo concreto: en la política actual en México hay una gran multiplicidad de demandas sociales, pero el asunto del combate a la corrupción pone prácticamente de acuerdo a todos y eso es el ¨significante vacío¨, que es la demanda general que une a todos y por la cual votan. El grupo que logre encontrar la demanda general que une en ese momento a los ciudadanos tiene más probabilidades de ganar la elección. 

El asunto es complejo, pero es muy importante porque tiene que ver a final de cuentas con la obtención y el ejercicio del poder, si lo logra el pueblo o lo detentan las élites dominantes. 

En este contexto, el año pasado, poco antes de las elecciones presidenciales en México en un artículo del 5 de mayo comentamos aquí en DigitalMex el libro de Laclau, La Razón Populista (2005). La polarizada discusión sobre el populismo sigue en la palestra.

Y el escritor postmarxista, fallecido en 2014, sigue siendo nota en nuestro país, ya que a su obra se le relaciona con personajes de la actual política mexicana (ver artículo El gurú de Andrés Manuel, de Martha Anaya, 11 de marzo 2019, Heraldo de México, que señala que el coordinador de los delegados estatales del gobierno de López Obrador, Gabriel García Hernández, se inspira en las ideas de Laclau).

El propio Presidente López Obrador mencionaba a Gramsci, en medio de sus matutinas polémicas, sobre la controvertida noción de sociedad civil y sus organizaciones, frente a la acción del Gobierno.  

Antonio Gramsci (1891-1937), con su noción de hegemonía cultural es el guía espiritual de Laclau y éste una influencia ideológica en movimientos como Podemos y Morena, que para conquistar el poder electoralmente se han constituido como Partidos. 

El Presidente López Obrador, que estudió ciencias políticas -como los jóvenes dirigentes de Podemos, Pablo Iglesias e Íñigo Errejón, quien tuvo contacto con Morena en años pasados-, sabe de la importancia de estas controvertidas definiciones gramscianas de hegemonía como concepto clave para pensar la política -según Laclau- y de la sociedad civil. 

Y sabe del uso a través de los medios que Gramsci reconoció como el instrumento de dominio cultural, de sometimiento a través del lenguaje, y que hoy en día son más que nunca la arena en la que se dirime el juego político (como lo demuestra su diaria fijación de la agenda pública y política por medio de su conferencia ¨mañanera¨ y sus giras cotidianas sin descanso, incluyendo los fines de semana por todo el país). 

Hay otros vasos comunicantes, Íñigo Errejón y Chantal Mouffe (viuda de Laclau) publicaron en 2015 sus conversaciones sobre el tema Construir Pueblo, asunto que López Obrador y los miembros de Morena estuvieron forjando desde antes de su fundación. 

Los referentes intelectuales y operativos de Morena son diversos y hasta contradictorios, pero ciertamente supieron encontrar el suficiente ¨cemento social¨ para ganar en el juego de las elecciones. 

Aunque en este juego el actual gobierno es en gran medida el ¨dueño del balón¨ (el Presupuesto de la Nación y su capacidad de cerrarle la llave a los apoyos de organizaciones no gubernamentales), en la actualidad el gobierno no es todo el poder económico y del otro lado, la oposición lo sabe. 

Es cuestión de ideologías (misticismo o mesianismo), discurso (retórica o demagogia) y ejercicio del poder (política o populismo).

Estos temas, englobados en la discusión sobre el populismo entendido como tendencia al socialismo (según la ¨Derecha¨) o como democracia radicalizada (de acuerdo con los defensores de las ¨Izquierdas¨), siguen siendo tan escabrosos y polémicos como la lucha de clases. 

Ya iremos viendo que resulta de este combate ideológico que tiene muchas nuevas aristas, porque esto apenas empieza.

Esperemos que la democracia, como respeto por la diferencia, prevalezca.

(Marzo 2019)


Visto 2183 veces
Valora este artículo
(9 votos)
Compartir en WhatsApp
Javier Ortiz de Montellano

Articulista invitado

Lo último de Javier Ortiz de Montellano