Faltan cuatro días para que se celebren las elecciones de gobernadora en el Estado de México y gobernador en Coahuila. La diferencia entre el triunfo y la derrota la hará tu voto, el de los ciudadanos y ciudadanas, el próximo 4 de junio.
Con los ojos bien abiertos muchos mexicanos y grupos de interés puestos en la elección de estas entidades observarán la actuación del INE, así como la actuación de las dos candidatas en el EdoMex y de los cuatro candidatos en Coahuila. Historias diferentes, propuestas distintas a los que iguala su aspiración al poder pero que queda en manos finalmente de la decisión ciudadana el próximo domingo 4.
En un lenguaje coloquial, surgen las preguntas ¿a quién le vas?, ¿a la corrupción o a la honestidad?, ¿a la capacidad o a la incapacidad?, ¿a la legalidad o a la ilegalidad? qué engrandecerá tu estado. Tu voto lo decide.
El momento difícil, el más íntimo, será cuando estés a solas en la casilla frente a la boleta en que vayas a marcar tu elección con tu voto. Pensar en lo que éste puede influir en el progreso de tu entidad: en la disminución de la inseguridad, en la salud, en la educación. Pudiera ser que antes de emitir el sufragio hayas tenido un mal rato y estés molesto o molesta y votes visceralmente. Lo sabemos. Al cruzar por tu partido o alianza en la boleta que el enojo no se apodere de ti y en un ánimo responsable lo hagas. La venganza no es buena consejera. Por esta razón, vota a favor de tu verdadera preferencia. Hazlo así: ten tu credencial a la mano, localiza tu casilla, reflexiona y vota por el futuro de los tuyos.
Decidir es tomar una determinación definitiva. Tu voto es una de las grandes decisiones que se toman en la vida. Decide tu futuro y el de los mexicanos. El voto manda. Es uno de los momentos estelares de la democracia. Quienes votan y quienes no, tienen el destino de México en sus manos.
Podríamos citar a Aristóteles o a Churchill sobre su visión de la democracia. Cada uno ha sido uno de los grandes teóricos del tema pero cada uno vivía contextos diferentes y tenía sus razones. Hoy tú tienes las tuyas, sin embargo, destina el tiempo necesario para reflexionar sobre lo que traerá consigo tu voto. Arrepentirse después será demasiado tarde. De tu decisión depende todo.
En el Estado de México el calendario electoral, hace algunos años, se modificó estratégicamente para no dejarse arrastrar por la ola nacional, a fin de concentrar el proceso en este sentido, no sólo en la ley sino en el ambiente político que viva el estado: triunfador, grande, diferente, con una identidad de nación que pese y defina. Tú decides.
