Toluca/Estado de México
Alberto Canúl Juárez, presidente del Banco de Alimentos, institución de asistencia privada sin fines de lucro, informó que si bien, hasta el momento, no han enfrentado amagos, amenazas, cobros de cuota o derecho de piso en la entidad, hace una semana en Ecatepec, dos trabajadores fueron remitidos al juez conciliador, bajo el argumento de haber cometido una infracción de tránsito.
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“Lo que nos tiene muy molestos es que a nuestros trabajadores los hayan tratado como delincuentes, y que con recibo sobre el pago de la multa el costo es mayor a cuando se hace la transacción sin recibo”, precisó.
Dijo que es el único lugar donde les ha ocurrido este tipo de maltrato, explicó que entiende que ignorar la ley no le permite ser omiso de ella, aunque apeló a la conciencia por parte de las autoridades, ya que el personal solo estaba bajando unas despensas y pidió a las autoridades estatales y municipales su colaboración para poder llegar a los menos favorecidos.
Explicó que la institución está dedicada al acopio de alimentos para personas en situación de marginalidad, por lo que a veces debe ingresar a zonas de difícil acceso, por ejemplo, el viernes durante la entrega de apoyos en una de las comunidades, en una colonia retirada del centro, oficiales de policía pidieron los permisos para carga y descarga de la unidad, pese a que les explicaron que solo estaban entregando despensas a personas de la comunidad, los patrulleros remitieron a dos trabajadores al juzgado en Las Américas.
“Los remitieron, y nos pidieron pagar una multa de 4 mil pesos con recibo, sin recibo redujo a 3 mil pesos. Los muchachos no tienen dinero, porque nosotros solo tenemos para el peaje, porque ellos llevan un servicio, así que debimos depositarles en su cuenta personal para salir, pero fueron 4 mil pesos por persona. Pienso que el presidente municipal no está enterado de eso, porque se supone que a todos los camiones se les exige lo mismo”, comentó.
Calificó dicha situación como una ofensa y pidió a las autoridades municipales, así como estatales tener criterio; además, añadió que pedirá al alcalde Fernando Vilchis el permiso, porque de no contar con él, podrían dejar de realizar su actividad y atender a las personas que lo requieren, gente vulnerable, de zonas alejadas.
Agregó que, hasta el momento, no se ha puesto en contacto con las autoridades municipales y que está pendiente solicitar el respaldo, pues el cobro por carga y descarga para el Banco resulta oneroso, más aún cuando se trata de realizar una labor social.
“Nunca hemos tenido problemas en los municipios, por el contrario nos han apoyado, lo que es más molesto es tratarlos como delincuentes, les quitaron agujetas, los encerraron y las camionetas están rotuladas para que se identifiquen”, refirió.
En Ecatepec, mencionó atienden alrededor de 200 familias en tres comunidades, “son pocas pues la mayor cobertura es en la zona poniente”, apuntó.
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