Toluca/Estado de México
Con 1,96 mts de estatura, es uno de los luchadores con mayor altura y tonelaje de nuestro país. Nos referimos a Murder Clown, hoy por hoy una de las figuras de la Triple A, que con su máscara, corpulencia y altura impone a cualquier rival.
La historia que ha vivido en los cuadriláteros:
“Inicié como aficionado, un día en casa cambiándole a la televisión, apareció la lucha, me acuerdo que los técnicos estaban Lizmark, Ángel Azteca y Atlantis, y quedé impactado con solo cinco años de edad, y es como nace mi afición por la lucha libre”.
Añadió que en 1992 aparece la Triple A, ya tenía otra opción; seguí por esa misma línea. Después empecé a entrenar y conocí la lucha en vivo, y empecé a entrenar con Shu el Guerrero. Dijo que siempre he tenido en Canek a mi máximo ídolo, y que al final fue uno de los que pudieron pulirme en el pancracio. Comparte que, desde antes de palpar toda esta parafernalia, supo lo que sería su peregrinar en esta aventura llamada lucha libre.
Recordó que a los 15 años:
“Me recibió Canek, y fue una madriza como tal, no me podía mover al otro día, pero regresé porque me gustó mucho el entrenamiento, la forma en que me trataban, la forma en que podía aprender. Y cuando acompañé a mi hermano por primera vez a una función, imagínate, quedamos como prendidos de esta magia; recuerdo que la primera vez que fui a la Arena México fue una lucha de Emilio Charles vs. Shocker por las cabelleras. Ya es diferente, fue sorprendente”.
Además, comentó que, por su altura, tuvo la oportunidad de trabajar como guardia de seguridad para una empresa, donde lo mandaban a cuidar a los artistas, y comentó que en una ocasión lo eligieron para ser guardaespaldas de Shakira, pero lamentablemente era todavía menor de edad y no pudo estar con la colombiana.
“En ese tiempo trabajaba en una empresa que se llamaba Acero, era de cuidar artistas, y me acuerdo mucho que mi hermano y yo siempre fuimos grandes de cuerpo e imponíamos. Nos mandaban a los mejores lugares con artistas, y había una gira con Shakira, y me dijeron que me iría a la gira con ella, emocionado, saber que iba a verla, pero cuando me pidieron mi pasaporte y mi INE, y cuando supieron que tenía 16 años, pues dijeron que no se podía, era menor de edad”, concluyó.
La historia de cómo Psycho Clown se vio obligado a dejar el ring y trabajar en Uber
