Las muertes violentas de las mujeres

DigitalMex - Periodismo Confiable

Publicado en Opinión

Las muertes violentas de las mujeres

Viernes, 29 Julio 2022 01:10 Escrito por 
Yuritzi Castañeda Ulloa Yuritzi Castañeda Ulloa Lentes violetas

Los últimos años se han visibilizado de una forma más mediática las muertes violentas de mujeres en el país y el estado, por lo que hemos podido ver más de cerca la historia familiar de muchas de las víctimas y darnos cuenta de la realidad que afecta de 9 a 11 familias al día en el país.

En junio de este año 89 feminicidios fueron reportados por la Secretaría de seguridad y protección ciudadana, sin embargo no podemos dejar de lado que esta cifra no atiende todas las muertes violentas de mujeres, y ¿por qué no las atenderá?, nos preguntamos, la respuesta es sencilla, las fiscaliza locales aún ponen muchos filtros para clasificar las muertes violentas como feminicidios, un ejemplo claro y muy reciente es lo sucedido con Debanhi en Nuevo León que hasta la intervención de peritajes particulares se ha podido hablar de un feminicidio.

Para quienes investigan los delitos en el país hacerlo con lentes violeta es una práctica a lejana, obligada y poco reconocida, por lo que muchas de las personas que integran nuestras fiscalías siguen viendo la perspectiva de género como un requisito más a cumplir dentro de sus tareas diarias, que les quita el tiempo de trabajo, capacitaciones que les quitan horas de descanso  dentro de jornadas llenas de exhaustivas cargas de trabajo, nada humanizadas, por esta razón para las autoridades ministeriales lo más sencillo sigue siendo hablar de muertes de mujeres por suicidios o problemas no relacionados a su sexo o género.

 

¿Cuántas muertes violentas de mujeres suceden en México?

Es una pregunta que debemos hacernos diario, será que realmente se están investigando las muertes de las mujeres con perspectiva de género, que están tomando en cuenta que quien comete estos homicidios son hombres que en su mayoría tenían una relación con las víctimas, que en los últimos años las muertes de las mujeres se siguen dando en el espacio privado y siguen siendo disfrazadas con problemas de salud física y emocional.

Las últimas semanas han sido un llamado de atención para la sociedad, un llamado de atención para tomar acciones y hacer de la lucha de las mujeres sea una lucha colectiva en la que todas y todos nos involucremos  para pedirle a las autoridades usen los protocolos y se capaciten, para que dejemos atrás los niveles de impunidad que siguen dando el mensaje de autoridades permisivas ante la violencia que sufren las mujeres, y una sociedad que con indiferencia sigue solapando el feminicidio.

Las muertes violentas de mujeres tienen entre sus líneas impunidad y revictimización, también tienen familias, niñas y niños que ven sus vidas afectadas para siempre, donde crecer y desarrollarse estará siempre marcado por la violencia feminicida, vidas que se ponen en pausa, que quedan en segundo plano por la búsqueda de justicia en un país donde lo que reina es la impunidad.

Las muertes de Debanhi, Luz, Cecilia Monzón, Irma, Brisa, Mariana y todas las mujeres mexicanas que han muerto los últimos años, en nuestras caras deben ser las últimas, deben ser precedente para las autoridades y la sociedad, debemos dejar de verlo como un problema lejano a nuestra realidad, porque no pasa en nuestro circulo cercano, debemos poner manos a la obra y accionar contra la violencia feminicida, con actividades reeducativas desde lo privado, pero también en el espacio público, debemos acercarnos a nueva información que nos permita dejar de normalizar el machismo, ver nuestros machismos aprendidos y normalizados y actuar frente a ellos, para que nuestros lentes violetas nos permitan gritar justicia para todas incluyendo a las mujeres que tenemos más cerca y muchas veces no alcanzamos a ayudar, compañeras de trabajo, amigas, familia que en ocasiones no pide ayuda por vergüenza, porque a nosotros nos ocupa más juzgar a las víctimas, saber que hacían, porque no estaban en casa, o que estaban haciendo dentro de casa para que los hombres que cometieron el delito decidieran hacerlo.

Es hora entonces, de acercarse al feminismo, de exigir justicia,  de aprender a ser diferentes en nuestras relaciones y ofrecer siempre nuestra mano para que más y más mujeres puedan tener a una vida libre y sin miedo.

Tw. @Yuri_Cast


Visto 1999 veces
Valora este artículo
(3 votos)
Yuritzi Castañeda Ulloa

Lentes violetas