¿Qué fue lo que pasó?
En palabras muy coloquiales, resulta que un grupo de veinteañeros, representados por alguien que dice le pueden llamar Henry, se organizó para hacer perder dinero a los “Fondos Bajistas”, - según dice él, en venganza porque durante la pasada crisis SubPRime “Mis padres perdieron nuestra casa en 2008 porque Wall Street jugó con la economía.
Se salieron con la suya, fueron rescatados y estamos aquí contraatacando”- y lo lograron. Lograron hacer que los Bajistas perdieran, de acuerdo con cálculos de Reuters, más de 5,000 millones de dólares.
¿Cómo lo hicieron?
Resulta que los “Fondos Bajistas” ganan cuando las empresas pierden (valor /precio de sus acciones). Ellos “piden prestadas” acciones de las empresas que van a perder valor, las venden, esperan (apuestan) a que baje y entre más baja, mejor; y entonces las recompran baratas. Su ganancia es la diferencia entre el precio a cómo la vendieron y el precio de re-compra.
Ellos apuestan porque el precio de una acción caiga y si hay muchos inversionistas hacen lo mismo con un activo o con un índice, sucede lo que en el Ibex-35 la semana pasada: el desplome se acelera y se agrava la inestabilidad.
Entonces, este grupo de jóvenes (Y no por jóvenes, inexpertos, porque Henry lleva en el tema de las inversiones desde el 2017) se organizaron y decidieron no dejar caer el precio de al menos 3 empresas a las que los Fondos Bajistas habían apostado porque cayeran: las de GameStop , las de la cadena de cines AMC y las de Blackberry. Mientras los Fondos Bajistas esperaban que el precio de las acciones de estas empresas bajaran, de pronto AMC subía un 53% después de un alza semanal del 278%, GameStop hacía lo propio un 67% acumulando ganancias semanales del 400% y BlackBerry un 112% este mes.
Lo cual hizo que los Fondos Bajistas Melvin Capital y Citron Research, que pronosticaban una caída del precio de las acciones, tuvieran que anunciar el cierre de sus posiciones en corto, es decir recuperarlas antes de que subieran más, ya que entre el martes y el miércoles solamente GameStop incrementó el valor de mercado de la compañía en 10,000 millones de dólares. Si los Fondos Bajistas no cerraban sus posiciones, seguirían perdiendo ya que, recuerden, ellos ganan la diferencia entre el precio a como vendieron las acciones prestadas y a cómo las recompran.
Y ¿cuál será el resultado de todo esto?
Bueno, derivado de que el precio de las acciones de estas empresas subió sin que la empresa haya realizado ninguna operación o anuncio relevante, sus acciones tenderán a recuperar su valor real (Hemos pasado de los 483 dólares que la acción de GameStop llegó a valer la semana pasada a los 90 dólares en los que se situó tras el cierre de la bolsa de Nueva York ayer). Mientras tanto, los tenedores de las acciones pudieron ganar dinero sin pensarlo, si logran venderlas mientras estén apreciadas se capitalizarán y podrán invertir en mejores opciones.
Por su parte, otros fondos bajistas pueden ver en el desmesurado precio de las acciones, inflado artificialmente hasta construir burbujas a la vista de todos, y aprovecharán la gran oportunidad de ganar mucho dinero apostando por su caída, sin embargo, no hay que olvidar el riesgo latente de que este u otro grupo de inversionistas puedan organizarse y manipular los precios de las acciones de empresas en quiebra o no y una entrada en el mercado a destiempo puede salir cara.
Queda por ver qué pasa en los próximos días, pero lo sucedido con WallStreetBets (los protagonistas) podría ser el principio de un cambio importante en el que los grandes inversionistas no tengan esa influencia casi absoluta sobre la marcha de los valores bursátiles.
