El mensaje de odio tiene sus consecuencias

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El mensaje de odio tiene sus consecuencias

Miércoles, 07 Agosto 2019 00:06 Escrito por 
El mensaje de odio tiene sus consecuencias Lo bueno, lo malo y lo serio

Parece ser claro el motivo por el que se dio la masacre que ocurrió en El Paso, Texas, en los Estados Unidos, en la que murieron 22 personas, 8 de las cuales eran de origen mexicano, con 26 heridos, fue el odio, pues de acuerdo a un manifiesto que se le relaciona al sospechoso identificado como Patrick Crusius de 21 años de edad, en espera desde luego de confirmarse su autoría, todo puede tener su origen en el enojo que sintió por lo que identifica como la “invasión hispana en Texas”, de acuerdo a su contenido.

El sábado tres de agosto Patrick habría conducido nueve horas desde Dallas, para dirigirse al centro comercial Walmart que se localiza en la zona de Cielo Vista Mall del Paso, Texas, en donde descendió de su auto y sacó un rifle de alto poder AK-47, mejor conocido como “cuerno de chivo”, serían las 10:00 horas cuando al dirigirse al centro comercial en donde habría unos 3000 compradores y unos 100 empleados, desde la zona del estacionamiento empezó a disparar en contra de quien se le pusiera enfrente, y después, al interior de la tienda, ocasionando el resultado ya mencionado.

Los acontecimientos duraron de 7 a 15 minutos de acuerdo a testigos, posteriormente fue detenido. Los agentes de la policía que lo aseguraron señalaron que confesó que: “mi objetivo era matar tantos mexicanos como fuera posible”, a éste se le ha identificado como un supremacista blanco.

A lo anterior habría que sumarle el hecho de que en E.U. armarse para cualquiera resulta demasiado fácil, aunque después de algún fatídico acontecimiento pueden ser considerados como perturbados, sin embargo, aparentemente no son excepción para hacerse de armas de alto poder.

No obstante, los acontecimientos no pueden apartarse de la idea que tiene mucho que ver con el discurso que ha utilizado el presidente estadounidense Donald Trump en contra de los latinos, y particularmente, de los mexicanos. El mensaje es una semilla que germina en contra de quienes ha señalado como violadores, ladrones, asesinos y narcotraficantes, acusándolos además de quitarles el trabajo a los nacionales de su país.

El Fiscal de Distrito, Jaime Esparza, indicó que la policía tratará el caso como “terrorismo doméstico” y buscarían la pena de muerte. Las autoridades habían explicado que el documento estaba cargado de “odio, intolerancia y fanatismo” y que podría mostrar una conexión del sospechoso con grupos de odio.

Como respuesta a los lamentables hechos, el presidente de México para asuntos internacionales, no perdón, el canciller Marcelo Ebrard se dirigió a Texas para apoyar a los familiares de los connacionales afectados. Posteriormente anunció que México podría pedir la extradición de Patrick Crusius y que el gobierno mexicano considera este acto como un acto de terrorismo en contra de la comunidad mexico-americana y que se tomarán acciones contra quien resulte responsable de la venta del arma de asalto que se utilizó en la matanza. Todo parece más bien un mensaje dirigido únicamente al pueblo mexicano, porque difícil se ve que el gobierno estadounidense seda a la pretensión de su vecino.

Además que es muy probable que la pena que alcance el responsable, una vez demostrada su culpabilidad, sea la pena de muerte, ¿puede ofrecer México una sanción más severa que esa?, Las declaraciones quedan en algo así como buenos deseos, a pesar de que se diga que se va a pedir un supuesto control de armas, que además ha sido tema de discusión por mucho tiempo, el negocio de la venta de armas es muy redituable para el país vecino.
 
Por otro lado, la postura que adopta el presidente Andrés Manuel López Obrador en este tema tan delicado, como otros no menos importantes, ha sido muy tibia, y vuelve a demostrar que no tiene una política exterior definida, ya que parece que el legado del benemérito de las Américas, Benito Juárez, solo la esgrime cuando le acomoda, porque no aprovechará la ocasión para poner las cosas en su lugar, y exigirle al presidente americano que cese su discurso en contra de los latinos, principalmente de los mexicanos.

Es la migración parte central de la agenda de Trump y es lo que ha motivado incluso su menosprecio hacia todo lo que no es nativo de su nación, aún y cuando él mismo es el resultado de la migración, pero, es lo que lo ha posicionado, ya que muchos estadounidenses se identifican con ese discurso y no se ve que tenga la mínima intención de suavizar su postura.

Aunque también parece ser un mensaje claro para el discurso del propio presidente de México, similitudes que se han señalado una y otra vez, y que pueden generar consecuencias muy graves para los mexicanos, sólo que de este lado, el odio que se va gestando es hacia los que piensan diferente a él.

Todos los días López Obrador exacerba los ánimos en contra de quienes piensan diferente a su visión, no hay día que no lo señale así, y eso puede escalar a condiciones a las que el pueblo no está preparado a enfrentar, puede ser un aviso.

En México, el discurso del presidente vulnera libertades y enfrenta a la sociedad, el llamado a sumarse a su gobierno sin criticarlo afecta la libertad de expresión ya que pretende someter a la prensa, aunque aparentemente lo va consiguiendo de a poco, pues se ha visto un cambio en los que antes eran feroces críticos y ahora parecen alinearse, o ¿será que ya se portan bien con el gobierno?, esto no le favorece a nadie, menos a la democracia.

Son muchos los ciudadanos que se encuentran en peligro en Estados Unidos y México, pero también en otras partes del mundo, el discurso xenófobo enfrenta a quienes piensan diferente, profesan otra religión, son de diferente color de piel o tienen otra nacionalidad, y si éste se alimenta de quien debería hacer lo posible por la integración, el resultado es una bomba de tiempo que en cualquier momento puede estallar.


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Alfredo Albíter González

Lo bueno, lo malo y lo serio