Toluca/Estado de México
Con la disminución de contagios por Covid-19, mujeres dedicadas a la limpieza de hogares se encontraron con más trabajo, pero mal pagado, pues pasaron de recibir 350 pesos a 200 por casa.
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Ese fue el caso de Margarita Gutiérrez, joven de 35 años que para sacar adelante a sus tres hijos decidió incursionar hace más de 12 años en la limpieza de hogares, trabajo que disminuyó con la pandemia ante el miedo de las personas de ser contagiadas y la baja de ingresos económicos en las familias.
"Antes de la pandemia limpiaba una casa por día, incluso fines de semana, me pagaban entre 300 y 350 cada una, me servía mucho porque soy mamá soltera de tres y a veces el dinero no alcanza".
A principios de este año, salió a buscar trabajo tocando casa por casa y su sorpresa fue encontrarse con personas que pagarían menos de lo que anteriormente percibía, situación que la desmotivó al considerar que su trabajo no es valorado.
"No sé si se debe a que ganan menos o no se recuperan de la pandemia, pero la gente ya no quiere pagar y uno por necesidad acepta lo que ofrecen porque como sea tengo que sacar adelante a mis hijos".
En los puntos más altos de contagios, las personas de las casas que limpiaba le pidieron no acudir definitivamente para evitar llevar el virus a sus hogares, supuestamente al estar mayormente expuesta al utilizar transporte público para trasladarse.
En ese momento, Margarita y sus tres hijos decidieron plantar papa, jitomate y comprar a bajo costo verdura para vender en bolsas casa por casa; no obstante, apenas alcanzaba para comer, por eso ahora pide a las personas valorar la labor de las empleadas del hogar y ofrecer pagos justos por su trabajo.
Trabajadoras domésticas
De acuerdo con resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del cuarto trimestre de 2021, en México, hay 1.8 millones de trabajadoras domésticas que realizan quehaceres de limpieza y otras actividades complementarias.
Las estadísticas indican que, México cuenta con una población ocupada de 58.8 millones de personas de 15 y más años, de las cuales 2.3 millones, es decir, el 4 por ciento realizaron trabajo doméstico remunerado; de ellas, 88 por ciento eran mujeres y 12 por ciento hombres.
De acuerdo con el INEGI, la ocupación de trabajadora doméstica que predomina es la que se refiere a la realización de quehaceres de limpieza y otras actividades complementarias (86%). Le siguen, el cuidado de menores de edad, personas con alguna discapacidad y adultos mayores (11%), lavar y planchar ropa (2%) y las ocupaciones relacionadas con cocinar, cuidar jardín, vigilar o cuidar accesos a propiedades (1%), todas ellas en casas particulares.
Además, en promedio, trabajan 30 horas a la semana y perciben un ingreso de 38 pesos por hora trabajada. Su edad promedio es de 44 años, 75 por ciento de ellas tienen entre 30 a 59 años de edad.
También se indica que su nivel promedio de escolaridad es de 8.2 años, equivalente al segundo grado de secundaria. De cada 100 trabajadoras domésticas, 99 prestan sus servicios sin un contrato escrito; solo 4 de cada 100 tienen acceso a servicios de salud; y 28 de cada 100 tienen algún otro tipo de prestaciones, como aguinaldo y vacaciones.
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